Como punto de arranque de esta respuesta he de puntualizar que no soy crítico de nada, y mucho menos en poesía. Por el contrario, estoy aprendiendo en METÁFORA el abecé de la preceptiva. Tampoco, al escribir sobre la política cultural de las instituciones alicantinas, recuerdo haberme referido en ningún momento al PSOE, del que me consta que, por su naturaleza de partido progresista, si estuviese en el poder en nuestra Comunidad estoy convencido de que aportaría más recursos a la cultura que a la Fiesta Taurina y al Museo de la Semana Santa. Supongo que el citado Museo no existiría bajo su mandato. Hechas estas puntualizaciones, paso sin más preámbulos al tema de referencia: “Perfiles poéticos alicantinos”.

En Alicante, por fortuna para los alicantinos y, por extensión, para el movimiento cultural español, existe un nutrido grupo de personas (más mujeres que hombres) que han luchado y lo siguen haciendo para engrandecer nuestro acervo en el sentido apuntado. Manuel Parra Pozuelos, María Dolores Carretero, Harmoníe Botella, Raimundo Escribano, Pedro Fuentes-Guío, Leonor Rico, Antonio Suárez, el propio Ramón Fernández y otras y otros poetas más, nos dan constante ejemplo de su abnegación permanente en beneficio de la Poesía. Pero ¿es esto suficiente para lanzar las campanas al vuelo hablando, y escribiendo, sobre la "Edad de plata de la poesía alicantina"? Evidentemente, no. Hace falta apoyo institucional y, no menos, el compromiso de escritores profesionales o, sin profesionalidad, de reconocida talla, dispuestos a prestar ayuda a quienes navegamos sin perder de vista la costa, para que se haga realidad el ensueño de nuestro amigo Ramón

Lo manifesté en mi anterior escrito y vuelvo a reiterar lo mismo. Las dos únicas instituciones alicantinas que están propiciando la cultura son, a mi parecer, la Universidad de Alicante y el diario “Información”. Lo demás, pura publicidad comercial, cuenta poco y sabe a falsedad. Otros grupos, sí, como los que cita Ramón Fernández, están luchando con denuedo por y para la Poesía, pero carecen de los recursos suficientes para levantar por sí mismos la cultura en Alicante. En cuanto al Ateneo, bastante tiene con sus tertulias vespertinas de té con pastelillos de gloria. ¡Y menos mal que allí está Leonor Rico!

En cuanto al Gil-Albert, prefiero no decir nada. Sería estúpido por mi parte dar ocasión a ciertas personas para que me tildasen de resabiado. Que escriba Ramón Fernández sobre este asunto. Lo que lamento del mencionado Instituto, y no debo ocultar, es que su almacén esté atiborrado de ejemplares atrasados, más alimento de ratas que del espíritu humano. Sobre el Círculo de Bellas Artes (idea de Raimundo Escribano que secundamos dos o tres personas más), me entristece que haya quedado en nada. En especial Pedro Fuentes lo puso en marcha con una gestión impresionante, que ha quedado en el sombraje del despropósito. Mas la idea del poeta Raimundo está ahí, viva, para que la sustantiven otras personas de mayor envergadura cultural.

¿Crees conveniente, querido amigo Ramón, competir con la parafernalia y la guita del PP? ¿Consideras justo que los millones de euros que gana la CAM, los invierta -la partida educativa me refiero- en potenciar la cultura de alto rango, en muchas ocasiones con la sala a menos de media audiencia y sufragando gastos millonarios, sin que sus directivos hayan tenido en consideración la creación de una escuela literaria de verdad para los "menesterosos" de la poesía? Con salas de exposiciones para los artistas de renombre y amigos "de". ¿De este modo va a prosperar lo que tú defiendes con tanto ahínco? Sin embargo, comprendo y admiro que tú y tantos otros y otras (personas nobles y desinteresadas por lo puramente crematístico y personal) batalléis en solitario y a contracorriente. Yo, no. Porque me siento envejecido y asqueado de tanta mentira en boca de ilustrados y de políticos de chicha y nabo. Gentes que se acuchillan, unos por coronar sus sienes en los certámenes poéticos (haciendo trampa en ocasiones), y los segundos, orondas barrigas satisfechas, clavándose dagas mientras se dan la mano con sonrisa de hiena. ¿Se me puede permitir un taco? Gracias. ¡Que les vayan dando!

¡Anda que no recuerdo las tardes-noches de Efemérides, ilusionados con la encendida poética de Juanjo Reyes y la extraordinaria actividad de Leonor Rico! Será que no recuerdo los hermosos versos de Maria Dolores Carretero y la formidable interpretación poética de su hijo. Y los sábados en el Ateneo, cuando se nos tenía reservado un espacio digno (no como ahora lo dispone Leonor Rico, en el vestíbulo) para hablar sobre poesía y cultura en general. Pero esto ya es historia, compréndelo. Ahora lo que priva son las medallas honoríficas para sacar cuartos de las arcas del PP., que son las nuestras pero que las manejan ellos. Investiga, amigo mío; investiga los millones de euros que se están gastando en TV., actos solemnes y no sé qué otras cosas más para rememorar el Quijote, cuando más de uno de los que disertan sobre el tema no han leído todavía la obra cumbre de Cervantes. ¿Para qué toda esta cantinela, cuando los universitarios se licencian sin saber apenas escribir? Para qué, cuando más de un periodista mete la gamba a diario en los rotativos de gran tirada? ¿Es ese el legado de Cervantes?

Luchad por la Poesía. Hacéis bien. Otros habrá que seguirán luchando por subirse el sueldo un cuarenta por ciento. Mas entretanto vosotros, auténticos poetas sin más posibilidades que las de vuestros versos como salgan, tendréis limpia la conciencia.

Ten en cuenta, amigo Ramón, que tal vez nuestro preclaro alcalde esté haciendo méritos para que algún día su imagen, labrada en alabastro, figuere en el Museo de la Semana Santa. A lo mejor hasta saldrá en procesión.

Un abrazo.
César.