............Cuando suena el teléfono, y el timbre te despierta del trance, te retrae del letargo, punzándote muy dentro el cerebro.

La luz entra a raudales por los grandes ventanales, se percibe el timbre monótono de su voz, se sienten las respiraciones del los compañeros y de alguno que se aclara la garganta con su clásico “ejem”

El pizarrón verde esta lleno de imágenes, letras, dibujos, que delinean estructuras, el número, el cuadrado, la forma., figuras y garabatos que al final se convierten en fino polvo blanco.

La niña esta muy lejos, su mente divaga, casi en el umbral del sueño, y en sus labios se dibuja una tenue sonrisa. Sus pensamientos se escapan fuera de la gran jaula de concreto, llena de pupitres y muchachos, de lápices y libros. Ellos están seguramente, en el parque, deleitándose con momentos de diversión, deslizándose en los columpios o en la rueda, o saboreando sabrosos helados y caramelos, o están en el regazo de su madre en el recuerdo de sus besos, en el dulce despertar que le anunciaba un nuevo día, en el cascabel de risa de su hermanito, en el olor de lavanda de su padre, o en la muñeca de trapo; fiel compañera de sueños, o en la muñeca nueva, la que tiene guardarropa y accesorios, y que espera ansiosa la salida para disfrutar del juego.

— Â¡Niña, niña!—. El regreso, es como volver de un sitio lejano a la velocidad de la luz y choca la realidad con la circunstancia.

— Â¡Niña, niña!. Contéstame esta pregunta, parece que estabas lejos—. La maestra la observa con severidad, sus ojos la miran fijamente, tras los cristales de sus gafas. Pero sus labios no dicen lo de sus ojos, en ellos no hay reproche, hay dulzura......

— Si maestra—. Contesta la niña, tomando confianza, pero su corazón late con fuerza.

— Niña, por favor contéstame esta pregunta. Cómo se llaman los movimientos del corazón ?—.

— Maestra, los movimientos del corazón se conocen como: Rotación y traslación —.

Un murmullo se siente en todo el salón. Una herejía brotó de los labios de la niña. Los sabihondos pusieron sus manos en su boca para ocultar la risa que afloraba en ellas. La maestra muy circunspecta y seria, le contesta.

¡ Niña!. Estas equivocada, estos no son los movimientos del corazón, entran en otra materia, en geografía y ahora estamos tratando otra cosa.-Verdad Pedrito---.Mirando al el niño con ojos de autillo. Él de un brinco, se yergue, estaba debajo del pupitre y asustado por lo imprevisto, asiente, moviendo la cabeza.
Esta vez todos ríen .

— -Silencio niños por favor---. Sentencia la maestra.

— - No maestra---, contesta la niña permaneciendo de pie. --- Los movimientos del corazón son traslación y rotación. Rotación, como cuando tengo mucho miedo y en las noches en que estoy sola, lo siento en mi pecho como un motor que gira y gira, y quiere salirse por mi boca, y casi no puedo respirar y me da ahogo, todo eso en un instante , en un momento, en una sola acción.

Los niños escuchan en silencio y la niña continua hablando.

— -Si maestra, y en recreo, corriendo detrás de los compañeros, haciendo nuestros juegos y ejercicios, siento el corazón abajo, en las piernas y los pies, y me traslado de un lado a otro como un tren en marcha y corro y corro sin descansar, por eso siento así los movimientos de mi corazón. Rotar y trasladar.
Rotación y traslación.

Rubén Patrizi