Lector amable y cordial:
recibe -es mi obligación-
esta felicitación
en este tiempo pascual.
Ya pasó de largo El Gordo
con el que todos soñamos
y aunque a gritos lo llamamos
el muy c. se hizo el sordo.
Es el día veintidós
de diciembre un día feliz
porque todo el mundo diz
que el dinero no lo es “to”.
Porque -ya lo sabes tú
y yo cada año lo veo-
que coinciden el Sorteo
y el Día de la Salud.
Conque ¡hala! ¡a celebrar
estos días familiares
de turrones y manjares
con alegría y en paz!
Y a esperar que sea mejor
el próximo dos mil siete
que tantas cosas promete.
¡Felices Pascuas, lector!
Perico de los Palotes