OSCAR PORTELA: UNA ARDIENTE PACIENCIA
(Alberto F. Robredo)
Oscar Portela es decir muchas cosas. Es Corrientes, no la bravía, sino la dulce. Es tradición, no la del atuendo, sino la de la esencia. Es Argentina, no la del mamarracho y el griterío cursi e ignorante, sino la del saber, que sólo en el infinito encuentra saciedad. Es amistad, no la superficial que se agota en el empalago de las formas, sino la profunda, que es sufrir en la exigencia y gozar en la entrega. Es política, no la que tiene al dirigente como principio y fin, sino la que es pura lucha, puro principio, puro sacrificio, en la que la provincia y la nación son el centro y el ser humano el principio y el fin. Es periodismo, no el que no es por perderse en la imbecilización y la mediocridad, sino el que es porque divulga para que la cultura nos esculpa en el camino a la perfección como meta.
Oscar Portela es definición en muchos sentidos. Es un autodidacta multifacético, cuya cultura requiere de varias vidas mucho menos jóvenes que la de él.
¿ Quién conoce de literatura con erudición ?. Oscar Portela. ¿ Quién bucea por los más intrincados vericuetos de la filosofía en búsqueda de respuestas a interrogantes siempre en aumentos ?. Oscar Portela. ¿ Quién puede escribir en un diario, dirigir una revista, o tener un espacio en radio o televisión, sin más norte que transmitir ?. Oscar Portela. ¿ Quién sobrelleva esa inmensa tarea que se impuso sobre sus hombros con una penuria económica constante por la indiferencia de quienes tienen poder ?. Oscar Portela. ¿ Quién es capaz de volcar su alma enriquecer de la poesía ?. Oscar Portela.
La síntesis de todo esto, que es Oscar Portela tiene un nombre: Amor. Y el amor es la más preciada representación de Dios.
Alberto F. Robredo (escritor, jurista) Buenos Aires. Argentina