¿Sabes? TilÃn TilÃn es una pajarita vagabunda y haragana. No tiene casa. Un árbol alto la invita con sus ramas largas, para que arme su nidito, pero TilÃn TilÃn no quiere trabajar.
Ayer, la llamó una estrella. Necesitaba de su compañÃa, le regaló destellos brillantes y un traje blanco de cristales y espumas.
TilÃn TilÃn le hizo un guiño y se fue.
Un congreso de horneritos decidió que debÃan hablarle para convencerla de cambiar su actitud.
La llamaron, lo intentaron, pero ella no quiso interpretar sus vuelos, ni sus cantos.
Asà pasaron dÃas y dÃas. Noches y más noches. Pasó la vida, entrelazando caminos, como el de todos los pajaritos sin domicilio.
TilÃn TilÃn se puso viejita. Estaba solita. Quiso refugiarse en el brazo tembloroso de un alerce, pero el viento fuerte la volteó.
Sobre su pechito negro, una espina se clavó y dejó al descubierto un corazón abierto.
Por allÃ, por esa herida se le deslizó la vida.
El cielo la alzó amoroso y depositó su cuerpito frÃo sobre un rayo de sol.
Los colibrÃes besaron su piquito y las nubes entonaron una canción de cuna.
Hoy TilÃn TilÃn trabaja en el cielo.
Cada noche le saca brillo a una estrella para que irradie más luz sobre los niditos de todos los pajaritos de la tierra.