AJUSTE DE CUENTAS
Nuestro mundo se desborda.
Bombardeados somos por asteriscos arteros
que nos desgarran la carne
a golpes, a sustos;
y con ésta hecha jirones
pedimos, ¡no! suplicamos
PAZ.
Es un ajuste de cuentas
por habernos servido del pastel
la porción equivocada:
ésa que no podÃamos costear.