Inmensa cantera de variados materiales, de donde extrae la palabra el pensamiento, para edificar obras grandiosas e inmortales como los obeliscos que van al firmamento. Lengua gloriosa, lengua de Cervantes, aromada con azahares, magnolias y jazmines, enriquecida con la exótica flora de los Andes, para dialogar con los ángeles y querubines. Lengua soñadora de una raza humana, que conserva en el alma nobles ilusiones, que al universo brillo y esplendor derrama, en narrativas, en (...)