Hay que ser americano o memo para excusar la falta al puesto de trabajo con que Dios no le ha despertado, no recordaba que hoy se casaba o que habÃa chocado contra la puerta del garaje, y que además cuele. Tener a Dios de despertador no debe de ser muy raro allÃ, pues lo sientan a la mesa en cada casa todos los dÃas. Bush ha dicho que Dios le dicta directamente su polÃtica agresiva en el exterior y sus ciudadanos se lo han creÃdo. Aquà no hemos pasado de sentar a un cura a (...)