Este fin de semana –6 y 7 de abril– la capital de Hungría abre las puertas de algunos de sus edificios más emblemáticos, muchos de los cuales están habitualmente cerrados al público. Se trata de la tercera edición de la iniciativa Budapest100 que permite conocer medio centenar de casas de gran tradición y cien años de antigüedad a través de visitas guiadas de la mano de arquitectos e historiadores.