Dice Karlos "pareces feliz". Pues claro. Claro que parezco feliz. Es porque lo estoy. Sin motivos aparentes porque estamos Simón y yo sentados en un cuartucho muy frÃo esperando a que nos lleven al avión de los paracaÃdas. Nos han dicho que Matraka ya está dentro, bien sujeto. Nosotros estamos aquÃ, sentados, con las capuchas puestas y bebiendo un chocolate caliente de máquina que nos ha traÃdo un soldado muy silencioso. Estamos todo emocionados y nerviosos. Me han dicho "unos 35 (...)