Foto: Archivo / EL TIEMPO
Todos los jueves, a las 19:30, suena una campanilla en la Real Academia Española (RAE). En su elegante sede a metros del Museo del Prado se reúnen en torno a una gran mesa ovalada los filólogos, intelectuales, catedráticos, cientÃficos y escritores que integran la institución. La delicadeza del tintineo marca el tono y el estilo de la sesión que está por comenzar.
La responsabilidad es colosal: hallar la definición más precisa posible para un grupo (...)