En las últimas obras me introduzco en el “realismo cÃnico”. Presento no la imagen del retratado -su imagen particular atendiendo a sus individualidades- sino aquella que conforman sus creencias, su imagen interna, su “mascara social” y su clase. Observo como dentro del cuadro las figuras se convierten en “modelos de rol”. Figuras a las que podemos reconocer pues nos hemos cruzado con ellas por la calle o hemos adquirido sus identidades y que, al mismo (...)