III
Ahora el tercer capÃtulo del Pergamino de la Vida, irrumpe en nuestro viaje por la casa-Libro, mientras ese sol que ha venido acompañando nuestros pasos curiosos y llenos de sorpresas, resulta acechado por unas nubes de desconcierto… No obstante, los primeros metros resultan alcanzados por la plenitud de sus rayos de felicidad, y la imprevista pregunta de alguien hacia Zulema, nos hace girar precisamente hacia el lado donde la habitación amenaza con volverse oscura. Es una (...)