Entro en casa al final de la tarde y encendio la luz del pasillo, avanzo y alumbro el cuarto de estar. Dio un respingo al encontrarse sentados en el sofa y en un sillon a su madre, su abuelo y su primo. "¡Que susto me habeis dado!", protesto. "Ya sabes que siempre te visitamos por estas fechas", le dijo su madre. "Si, lo se, pero se me olvida".
Una hora antes:
Se despide de una pareja de amigos con los que ha tomado un cafe en una terraza del centro de la (...)