“Ciudad narcotizada, fraudulenta, ladina, fugitiva, resignada, ciudad de sus patriotas usureros, ciudad de impostaciones imperiales, caminas, caminas, el aire hiede, tu caca en el fangal bancario, tus crujientes soretes verdolagas lejos del páncreas, lejos de tus manos,
mecidos como auroras neoyorquinas, como dulces ensueños de grandeza,